Pajartillo Bar

Si estás buscando un lugar donde disfrutar de buena comida y un ambiente acogedor, Pajartillo Bar en Plaza Pajartillo, 3 en Santiponce, Sevilla es tu sitio. Este bar destaca por su gran amabilidad y servicio, así como por ofrecer cocina casera sin atajos: aquí no hay microondas, todo se elabora al instante con productos ecológicos de la zona. Las tapas y platos para compartir son abundantes y a precios muy económicos. ¡No te olvides de probar las papas fritas, son un must!

Con una calificación de 4.3 sobre 5 en TodoBares, es evidente que a la gente le encanta. Ya sea que vayas por sus carnes a la brasa o un delicioso cordero, cada bocado está lleno de sabor. Además, no puedes marcharte sin probar sus postres de elaboración propia. Si buscas un lugar para desconectar y disfrutar con amigos o familia, llama al 955996443 y hazte un hueco en este encantador bar. ¡No te arrepentirás!

Dónde se encuentra Pajartillo Bar

¡Tienes que conocer Pajartillo Bar! Este lugar se encuentra en Pl. Pajartillo, 3, 41970 Santiponce, Sevilla y es simplemente genial. Cuando llegas, el ambiente te atrapa de inmediato; tiene un toque rústico y acogedor que te hace sentir como en casa. La decoración es muy peculiar, con carteles antiguos y un patio con parras que suman ese encanto especial a la experiencia.

La comida es un verdadero festín, y lo que más se recomienda aquí es sin duda el pollo frito. Enserio, ¡ESPECTACULAR! Aunque la ensaladilla está buena y el menudo se ve prometedor, debo confesar que me decepcionó un poco por lo soso que estaba. Pero no te preocupes, el pollo frito te hará olvidar eso al instante. Y para cerrar la comida, el tocino de cielo es todo un manjar, así que asegúrate de dejar espacio para ello.

El servicio también es de 10; las camareras son super amables y el servicio es rápido, así que nunca tienes que esperar mucho. Además, es fácil encontrar aparcamiento en la zona, lo cual siempre es un plus. Aunque ojo, no aceptan pago con tarjeta, así que asegúrate de llevar efectivo.

¿Quieres algo más? El precio es muy ajustado, entre 10-30 € por persona, así que puedes disfrutar de unas tapas riquísimas sin que se te suba el precio a la cabeza. Sin duda, este lugar se gana un 5 estrellas en comida, ambiente y servicio. ¡Ya estoy pensando en repetir! Atrae a cualquier amante de la comida casera y te aseguro que te sentirás como en un auténtico cortijo andaluz.

Qué tipo de cocina se ofrece en Pajartillo Bar

Y ya que estamos hablando del Pajartillo Bar, no puedo evitar mencionarte su encanto especial. Este lugar tiene un aire de tradición que te atrapa desde que entras. La terraza exterior es perfecta para esos días soleados, y su emparrado crea un ambiente agradable. Además, si decides sentarte dentro, el pequeño salón es acogedor, ideal para comer en invierno. Te aseguramos que vas a estar cómodo sin importar dónde te elijas.

En cuanto a la comida, ¡ni hablar! El pollo frito es su estrella indiscutible, y es que viene acompañado de unos pimientos verdes fritos y abundantes ajos que le dan un toque espectacular. Recuerdo que la media ración de pellizquitos, esos trocitos de cerdo con chimichurri, también dejaron huella en mi paladar. Las porciones son generosas, así que saldrás satisfecho. Y si te queda un huequecito para el postre, no te pierdas el arroz con leche casero, ¡es para morirse de rico!

Eso sí, hay que estar preparados, porque el servicio a veces se puede poner un poco lento. Parece que se toman su tiempo, pero hay que tener en cuenta que todo se elabora al momento, y eso tiene su merito. Si bien la espera en ocasiones puede pasarse de la cuenta, no he dejado de disfrutar de la experiencia gastronómica.

En resumen, en Pajartillo Bar vas a encontrar una cocina tradicional andaluza, donde todo gira en torno a platos bien elaborados y abundantes. El pollo frito, el cordero y esos deliciosos pellizquitos son las especialidades de la casa. La calidad precio es insuperable, así que, con un presupuesto de entre 20 y 30 € por persona, te llevarás una sonrisa en el rostro y, probablemente, ganas de volver. ¡Te lo aseguro!

Utilizan microondas en la preparación de los alimentos

Y si estás pensando en dónde ir a comer en Santiponce, Pajartillo Bar es una opción que deberías considerar. ¡De verdad! Cada vez que vamos, nos enamoramos un poco más de su comida, especialmente de las mollejas de cordero a la plancha. ¡Esas cosas son una delicia! Además, no te puedes perder el hígado de cordero plancha, que es simplemente buenísimo. La verdad es que el trato es genial y el ambiente es acogedor, como de toda la vida. Con un precio de entre 10 y 20 euros por persona, ¡no hay excusas para no ir!

El bar tiene su propio encanto, una mezcla de lo antiguo y lo auténtico que lo hace especial. La decoración puede parecer un poco viejita, pero eso le da un aire único que te hace sentir como en casa. Los postres caseros, especialmente el tocino de cielo, son el toque perfecto para cerrar una buena comida. Eso sí, si eres de los que no tienen paciencia, mejor llega temprano, porque se nota que se toman su tiempo. Si decides ir con los peques, no te preocupes, la plaza delante es tranquila y perfecta para que jueguen mientras tú disfrutas.

Mi grupo y yo siempre nos decantamos por el pollo frito, que, según dicen, aquí lo preparan mejor que en ningún otro lado de Sevilla. La presa ibérica que hemos probado también está para chuparse los dedos. Y aunque a veces el servicio puede ser un poco lento, ¡vale la pena! Eso sí, un pequeño consejo, olvídate de pagar con tarjeta, ya que aún no tienen esa opción.

Sobre lo del microondas, te cuento que aquí no lo usan en la preparación de los alimentos. Todo es casero y hecho al momento, así que puedes estar seguro de que lo que comes es auténtico y no algo calentado. Así que si buscas un lugar donde disfrutar de buena comida, con los sabores de toda la vida, tu sitio es Pajartillo Bar. ¡Ya me contarás qué tal!

Qué caracteriza la comida de Pajartillo Bar

Y hablando de Pajartillo Bar, ¡menudo lugar! Este sitio en Plaza Pajartillo, 3, Santiponce es de esos que tienen 5 estrellas en algunos rincones de la web, pero como en todo, hay de todo. La comida es absolutamente natural y de esas que te recuerdan a la abuela cocinando, sin trampas. Me cuentan que su pollo frito con pimientos fritos es una delicia que no te puedes perder. La combinación es simplemente espectacular, y si te apetece algo diferente, sus pellizquitos de cerdo y pinchos de cordero también son altamente recomendables.

Ahora, no todo es oro lo que reluce. He escuchado también de alguna que otra experiencia menos que feliz. Por ejemplo, hay quienes se han encontrado con situaciones un poco patéticas, como llegar a las 22 horas y darse cuenta de que todo estaba lleno. Bien, hay que tener paciencia, ¿no? Pero luego, parece que la camarera no se acercó a tomar nota y después de 45 minutos de espera, le dijeron que se fueran a cenar a otro sitio. ¡Para reírse, vamos! Así que sí, hay que ir con la mente abierta, porque el servicio puede ser un poco lento en ocasiones.

A pesar de eso, muchos coinciden en que el lugar tiene un encanto que no se encuentra fácil hoy en día. Es de esos bares que te transportan a tiempos más simples, con guisos caseros y tapas de toda la vida. Y aunque en su carta a veces faltan algunos platos y no tienen posibilidad de pagar con tarjeta de crédito, el personal suele ser amable. Así que, ¿qué caracteriza la comida de Pajartillo Bar? Sin duda, la autenticidad, los sabores de lo clásico, y sobre todo, esa esencia que te recuerda a las comidas caseras. Si buscas una experiencia genuina en Sevilla, este sitio es una apuesta segura. ¡Definitivamente vale la pena una visita!

Qué tipo de productos utilizan para sus platos

Y después de haber probado varias cositas, tengo que decirte que el Pajartillo Bar se ha convertido en uno de mis lugares favoritos en Pl. Pajartillo, 3, 41970 Santiponce, Sevilla. Este sitio es un verdadero hallazgo, con una Valoración de 5 estrellas por la comida y el ambiente. Aquí la comida tradicional brilla y su relación calidad-precio es simplemente increíble, así que seguro no vas a salir con el bolsillo vacío. Por lo general, puedes cenar por unos 10-20 €. Perfecto para cualquier plan.

El ambiente es otro punto a favor. Puedes elegir entre comer en su salón interior acogedor, o en su patio cubierto que está adornado con una enorme parra, lo que le da un toque único. A veces, hay una vista impresionante de Itálica mientras disfrutas de tu comida, así que no olvides sacar algunas fotos. Para las recomendaciones, no puedes dejar de probar su famoso pollo frito con pimientos fritos y unas patatas que son de otro mundo. También tienen unos caracoles que, aunque no todos los días están perfectos, han dejado a más de un comensal con ganas de repetir.

Claro que, no todo es oro. Si bien el servicio es bastante bueno, hay momentos en que puede haber una espera, especialmente cuando el lugar se llena. Algunos han tenido experiencias menos gratas debido a la inexperiencia de algunos camareros. Pero a pesar de eso, yo creo que vale la pena arriesgarse, porque cuando te llega el plato, y sobre todo si es el menudo o el cocido de garbanzos, realmente se te olvida la espera.

Ahora, en cuanto a la calidad de los productos, es un sitio que se asegura de utilizar carne de calidad en todos sus platos. Ya sean chuletas de cordero o el chuleton de ternera, aquí te puedes esperar un festín con ingredientes frescos y caseros. Así que, si estás buscando un lugar para disfrutar de cocina auténtica, definitivamente, Pajartillo Bar es un 100% recomendable. ¡No dudes en darle una oportunidad!

Cuáles son algunas de las opciones de tapas disponibles en el bar

Y bueno, como te decía, Pajartillo Bar tiene su encanto, pero, madre mía, el servicio podría mejorar bastante. Hay una camarera que parece que le dan latigazos cada vez que le pides algo. Te atiende con una cara de pocos amigos que no es nada agradable. Realmente, esperamos más por la comida que por todo lo demás. Pero, por otro lado, si la comida es lo que importa, ¡hay que decir que se come estupendamente!

Aparte de eso, el bar tiene un patio pequeño dentro que es muy acogedor, perfecto para esos días en los que no quieres que te molesten los coches. Te sientes a gusto, y eso siempre suma. Y por si te preocupa el precio, aquí puedes cenar bien por 40-50 € por persona, lo cual no es una locura considerando lo buenísima que está la comida. El pollo frito con pimientos fritos es un MUST, y si eres de las personas que se mueren por las patatas fritas, la combinación de pollo frito con patatas fritas y pimientos es de otro mundo.

La verdad es que en la última visita, nos llevó un rato mucho más largo de lo esperado para que nos sirvieran. Una hora y cuarto esperando y al final tuvimos que irnos sin comer. ¿Y qué tal la atención? Te cuento que era un poco caótica. Nos dijeron que había que respetar el orden de las mesas, pero resulta que veíamos cómo otros pedidos llegaban antes que el nuestro. Al final, lo que nos quedó fue cruzar la calle y, en diez minutos, encontrarnos en otro bar devorando algo rico.

Y hablando de tapas, si decides arriesgarte y darles otra oportunidad, te recomiendo que pruebes la ensalada con melva o los filetitos de pierna de cordero asados con patatas. Es todo tan fresco y bien sazonado que seguro que no te dejará indiferente. Así que, si estás buscando un sitio con encanto para disfrutar, ¡Pajartillo puede valer la pena, pero ve con paciencia!

Hay platos específicos que se recomiendan probar

Y ya que estamos hablando del Pajartillo Bar, no puedo dejar de mencionar lo que se vive allí. Es un lugar con un encanto andaluz que te hace sentir como en casa, solo que un poco más sabroso. La comida es totalmente casera y hay que destacar que la relación calidad-precio es inmejorable. Eso sí, un consejo: llevad efectivo, porque no aceptan pagos con tarjeta. Puede sonar un poco antiguo, pero en este sitio, eso es parte de su encanto.

Te tiene que importar poco si hay un poco de espera. En lugar de ponerte nervioso, relájate y disfruta del ambiente. El servicio puede tardar un poco, pero te prometo que vale la pena la espera. Cuando te sirvan ese pollo frito solo con sal, recordarás lo que significa comer realmente bien. Y ni hablemos de las papas fritas, pimientos fritos y ajos que los acompañan, ¡es todo una experiencia sublime! ¡Se me hace agua la boca!

Y si vas con hambre, no puedes dejar pasar el hígado de cordero a la plancha. Es un plato que no muchos se atreven a probar, pero, amigo, es excelente. Además, me ha encantado el mosto, que está increíble y complementa cualquier comida. Así que no dudes en pedirlo. Y el postre, ¡ay el postre! El tocino de cielo y el arroz con leche son completamente caseros y lo mejor que puedes encontrar en Sevilla.

En resumen, si te preguntas qué platos específicos deberías probar cuando vayas, ¡no busques más! Tienes que empezar con el pollo frito, seguir con el hígado de cordero y cerrar con uno de esos postres que te hacen volar. Todo esto en el Pajartillo Bar... ¡te aseguro que saldrás deseando volver!

Cómo es el ambiente en Pajartillo Bar

Y después de todo este rollo de comida y servicio, hablemos un poco de cómo es este lugar en general. Mira, Pajartillo Bar tiene una decoración bastante sencilla, como un bar de toda la vida. Te puedes sentir a gusto si lo que buscas es un sitio para relajarte con amigos, aunque la verdad es que, a veces, ese ambiente se puede ver afectado por el ritmo que lleva el servicio. ¡Es un poco desesperante, la verdad! Si vas en un fin de semana con niños y esperas que les traigan la comida rápido, mejor prepárate para una larga espera.

Hemos ido más de una vez, y aunque la comida es súper rica, lo de esperar como si estuvieses en una cola del banco es una experiencia que no quiero repetir a menudo. Es que a veces llegas y ya sabes que te vas a tener que armar de paciencia. Gente que ha ido también se ha quejado de lo mismo, ya que incluso hay quien ha tenido que estar más de una hora y media esperando su pollo frito. ¡Imagínate la frustración si a tus peques les entra el hambre!

Y sobre el ambiente, pues… la verdad es que no siempre es el mejor. Al final, si te encuentras con una recepcionista que no tiene muchas ganas de atenderte, el buen rollo se puede ir al traste rápidamente. Como bien nos pasó al preguntar por una mesa, la respuesta fue más fría que una cerveza a medio beber. En comparación, hay otros lugares, como la Bodega El Mirador, donde la atención es más cálida y te hacen sentir bienvenido desde el primer momento. Así que sí, el ambiente en Pajartillo Bar podría mejorar un poco si le echan más ganas al servicio. Todo depende de la suerte del día, o de si tienes la paciencia de un santo. Pero, bueno, ¡es lo que hay!

Fotografías Pajartillo Bar