La Telera 1860

La Telera 1860

La Telera 1860 es un auténtico tesoro en C. Cuevas de la Sombra, 1, en el encantador Setenil de las Bodegas, Cádiz. Este restaurante está clasificado como el n.º 10 de 33 en la localidad y cuenta con una puntuación de 4.4 sobre 5 en Restaurant Guru, gracias a las 388 reseñas de sus comensales. Imagínate disfrutando de vistas panorámicas del río Guadalporcún mientras pruebas platos de cocina mediterránea y española en un ambiente acogedor y lleno de buena música.

Lo que más sorprende de La Telera 1860 son sus porciones justas pero muy sabrosas, aunque los camareros podrían familiarizarse un poco más con su deliciosa carta. ¡El servicio es rápido y amable! La combinación de un entorno atractivo, con instalaciones agradables y un ambiente acogedor, la convierte sin duda en el sitio más bonito de Setenil. Si te apetece, puedes hacer una reserva llamando al 644330717 y vivir una experiencia gastronómica única en este rincón de Andalucía.

La Telera 1860

Restaurante
4,6
431Reseñas
Fotos
C. Cuevas de la Sombra, 1, 11692 Setenil de las Bodegas, Cádiz
644 33 07 17

Horarios La Telera 1860

DíaHora
lunes13:00–21:00
martes13:00–18:00
miércoles9:00–18:00
jueves13:00–21:00
viernes13:00–23:30
sábado13:00–23:30
domingo13:00–23:00

El horario podría cambiar.

Mapa Ubicación La Telera 1860

Dónde se encuentra La Telera 1860

¡Hey, amigos! Si alguna vez te encuentras por Setenil de las Bodegas, tienes que hacer una parada en La Telera 1860. Este restaurante es un verdadero hallazgo, y te prometo que no te lo esperas hasta que cruzas esa puerta. Desde que entras, te impactan los detalles que lo hacen especial, como ese impresionante túnel que pasa bajo el puente. Es como un pequeño viaje que va preparando tu paladar para lo que está por venir. ¡Y las vistas al río son la guinda del pastel!

La comida es simplemente increíble. Todos los platos que probamos estaban buenísimos, y hay para todos los gustos. Los tacos de rabo de toro y la sardina ahumada son unas delicias que no debes dejar pasar. Aunque yo le haría una pequeña crítica al carpacho de vaca retinta, que estaba un pelín cargado de aceite y sal... pero, vamos, en general, todo fue espectacular. Además, con precios que rondan entre 20 y 30 euros por persona, es un auténtico chollazo.

El ambiente en La Telera 1860 es muy acogedor; perfecto para pasar un rato agradable en buena compañía. El personal es súper atento, como cuando Hugo nos recomendó esa tarta de queso que se volvió en la estrella de la comida. Sería un crimen no probarla. De hecho, si vuelvo a Setenil, lo haré solo por esa tarta. ¡Una maravilla pura!

Así que ya lo sabes, si quieres disfrutar de una experiencia memorable en Setenil, no olvides visitar La Telera 1860. Se encuentra en C. Cuevas de la Sombra, 1, 11692 Setenil de las Bodegas, Cádiz. Y sí, ¡no olvides hacer una reserva, que suelen llenarse rápido!

Qué tipo de cocina ofrece este restaurante

Y bueno, La Telera 1860 es un sitio que te deja impresionado desde el primer momento, ¿verdad? Entramos por la panadería La Dehesa y, de pura casualidad, nos topamos con un plato de queso y jamón que estaba de otro mundo. Nos gustó tanto el ambiente que decidimos bajar y descubrir el restaurante. La decoración es súper acogedora y al atravesar el local, llegamos a una terraza que da al río. ¡No podía ser más bonito! Desde ahí, viendo el agua correr, se te olvida el estrés del día a día.

Te cuento que la atención fue de lujo, 10/10. Los camareros son super simpáticos y siempre están pendientes de ti sin ser pesados. La comida es otro nivel; yo no puedo dejar de recomendarte la tarta de galletas Lotus. No sé qué tienen, pero no he probado algo igual en ningún otro sitio. También probamos los cartuchos de chicharrones y el carpaccio de vaca retinta; sinceramente, no hay nada que no me haya gustado. Además, esos 20-30 € por persona que mencionan son más que bien invertidos para la calidad que ofrecen.

Y ya que estamos, ¡no te olvides de las patatas bravas y la tarta de queso Payoyo! Ambasaditas con un toque espectacular. Aunque, pues bueno, si te gusta el pulpo, ya te aviso que el de aquí un poco duro, así que mejor ve a la segura con otros platos. En definitiva, este lugar en Setenil es un must en tu lista.

En cuanto a la cocina, pues sí, aquí te vas a encontrar con una fusión de sabores que celebra la tradición andaluza. Tienen todo, desde el delicioso jamón ibérico hasta platos reconfortantes como el guiso de garbanzos, además de opciones más modernas y creativas. Así que si estás pensando en dar una vuelta por Setenil, este restaurante debería ser tu próxima parada. ¡Te prometo que no te arrepentirás!

Cuál es la clasificación de La Telera 1860 en Setenil de las Bodegas

La Telera 1860 es un lugar encantador donde la experiencia comienza en el mismo momento en que entras. La decoración llama la atención y te hace sentir como si estuvieses en un rincón especial del mundo. Además, el ambiente es estupendo; el hilo musical hace que quieras quedarte a vivir allí. Y, claro, el servicio es de cinco estrellas, con un equipo de camareros siempre atentos y amables, que incluso traen agüita para tu perrito. ¡Eso sí que es atención al cliente!

La comida es para morirse. Si eres fan de los quesos, no puedes pasar sin probar la tabla de quesos de la Sierra y esas patatas bravas que son una locura. Y no olvides pedir el pan, que viene acompañado de un aceite increíble y una mantequilla de albahaca y ajo que te hará querer comerte una barra entera. ¿Y qué tal si te animas con el brioche de costilla deshilachada? Es una sorpresa que te dejará con ganas de más. Te lo prometo, no te arrepentirás.

Además, la atención no se queda atrás. La camarera, que además de ser súper simpática, te ayuda a elegir lo mejor del menú, asegurándose de que tu comida sea siempre una experiencia genial. Y si tienes suerte, tal vez puedas sentarte cerca de la estufita en invierno, lo que hace que cenar aquí sea aún más acogedor. ¡Todo un lujo!

Entonces, si te preguntas cuál es la clasificación de La Telera 1860 en Setenil de las Bodegas, déjame decirte que este restaurante se lleva cinco estrellas en todos los aspectos: comida, servicio y ambiente. Así que, ¡no dudes en planear tu visita!

Cuál es la puntuación de La Telera 1860 en Restaurant Guru

La verdad es que La Telera 1860 es una joyita que no te puedes perder si estás de paso por Setenil de las Bodegas. La experiencia fue genial, desde el momento en que llegamos. El ambiente en la terraza junto al río es sencillamente mágico, aunque, aviso: las mesas altas son un pelín incómodas. Pero, sinceramente, eso no opaca lo bien que se está allí. Los chicos que trabajan son súper serviciales y están siempre pendientes de que no te falte de nada. Si decides cenar aquí con amigos, lo pasas de lujo. Os dejo una preguntita: ¿cuándo nos vamos a volver a reunir y repetir esa cena?

Hablando de la comida, ¡vaya delicia! Cenamos cuatro personas y nos salió por unos 90€ en total, lo cual es bastante razonable. El carpaccio de vaca retinta es una de las obligaciones que no puedes dejar pasar. Pero no te quedes solo con eso, también probamos la famosa payogiana de la tarara y, para cerrar con broche de oro, la tarta de lotus. Te prometo que te hará sentir como si estuvieras en el cielo. Y sí, repetimos al día siguiente para el desayuno, nos encantó tanto que no pudimos resistirnos.

Lo que más me gusta de Setenil es que es un lugar único, con esa mezcla de casas y cuevas que forman parte del paisaje. Es un sitio donde puedes disfrutar de un vinito junto con una tabla de quesos y jamones. El ambiente es muy tranquilo, ideal para esos momentos de disfrute que a veces necesitamos en la vida, como tomarse un respiro y dejarse llevar. Si queréis disfrutar de una buena cena, os recomiendo reservar porque se llena rápido, sobre todo en temporadas altas.

Y por si te lo estás preguntando, según Restaurant Guru, La Telera 1860 tiene una puntuación de 4 estrellas. Así que no lo pienses más, ¡haz tu reserva ya y pásalo en grande!

Cuántas reseñas han dejado los comensales sobre La Telera 1860

Así que, después de ese paseo por el puente, vimos La Telera 1860 y nos entró hambre de golpe. La terracita tenía buena pinta, así que decidimos hacer una parada. La cosa es que, desde el momento en que nos dieron la carta vía QR, ya sabíamos que iba a ser un poco diferente. La variedad no era nada del otro mundo, pero como estábamos allí, nos lanzamos a probar varias cosas.

Empezamos con un salmorejo que, para ser honestos, no era para tirar cohetes. Estaba normalito y los tacos de jamón que lo acompañaban estaban un poco duros. Después, decidimos arriesgarnos con la pata de pulpo, que no estaba en la carta habitual, pero nos tentó lo suficiente. Gran error. Esa cosa estaba dura como una piedra. Ni la salsa que lo acompañaba lograba salvarlo, lo que fue una gran decepción. Luego, el lomo de bacalao en salsa de piquillo llegó y, para ser sincero, era un trozo pequeño que parecía más bien descongelado que fresco, y se notaba. Y no me hagas empezar con los tacos de rabo de toro, que estaban simplones y casi sin sabor. No se lo recomendaría ni a mi peor enemigo.

Lo peor de todo fue la tardanza. La comida tardó una eternidad en salir, y lo que se supone que es una comida, se convirtió en una larga espera con platos que llegaban a cuenta gotas. Nos quedamos con las ganas de pedir otro plato de pulpo, pero después de lo que ya habíamos probado y la lentitud en el servicio, decidimos que mejor no. Y no hablemos de la sorpresa en el ticket, donde marcaron que habíamos pedido dos platos de pulpo en vez de uno, ¡un desastre! El precio total llegó a 18,90€ por ese lío, que, honestamente, no vale la pena.

En total, creo que la experiencia podría mejorar mucho si tuviesen un poco más de organización y prestaran más atención a los detalles. Al parecer, no aceptan tarjetas Gourmet, así que planeen bien su visita si se animan a ir. De verdad, un establecimiento como este necesita una buena reestructuración en su equipo y una revisión de su carta. Y, para quienes se lo pregunten, no lo recomendaría en absoluto. Para rematar, sobre las reseñas, no tengo el número exacto, pero, sinceramente, creo que las que dejan los comensales reflejan un sentir muy similar al nuestro: decepción y necesidad de cambios.

Fotografías La Telera 1860

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